“Mi
niña no te cambio, ni te pienso cambiar; no cambies tú, estoy completamente
seguro que no te podría cambiar por otra, pido que sigas siendo la misma mujer de la que me enamore, quiero que seas siempre tú misma,
sí, la misma mujer que con sus encantos me enamoro. No pediré que cierres tus oídos a todo; sino
que confíes en mí, que estés atenta a mi voz, a mi amor, abre tu vida para mí y
deja que mi vida sea tuya, mi amor, mi niña, aprende que soy tuyo siempre y
cuando tú así lo quieras, continuo así entre tus pensamientos y tus manos, hace
mucho tiempo, si tú quieres será para siempre […]”
Estoy
otra vez escribiéndote, como si alguien
te hubiera regalado la manía de pocas veces escribirme, no estoy reclamando, solo
argumentando, mi amor, -mi vida- tú sabes que soy solo tuyo, no quiero a nadie más
que despierte en mis brazos, mucho menos en mi cama, cada noche sueño contigo,
lo difícil no es soñar, sino despertar y sentir que no estas, lo que quiero contigo es inalcanzable, a veces
pienso sobre lo que anhelamos y concluyo
que es imposible. No es que sea cobarde,
sino, que a veces te extraño tanto, tanto… Que parecía que el mundo se limitara
hacia mí. Esta distancia que me hace creer que muy a menudo estoy perdiéndote, mi amor nunca había tenido un amor así de
lejos como te tengo a ti, aun no encaja en mi vida esta forma de amar.
A
esta hora, la tarde es fría y la soledad me invade, el silencio que reina en mi
cuarto, ( el tú ya conoces) ahora te deseo y
a la misma vez te quiero, mas sin embargo no me aflige, la distancia,
mucho menos el amor […] Se muy bien que pasaran estos
meses y de pronto estarás a mi lado; o que más quiero es que pasen todas las
ausencias que me hacen esperarte en esta vida.
Sabes,
hoy es cuando me arrepiento de haber desperdiciado momentos contigo (aquellos
ratos en los que me enojaba y con mi egoísmo te hacía daño, había salido de un
mundo, donde los desprecios siempre estaban a la merced de mi vida […]
)Aun no aceptaba lo nuestro, a veces me parecía un sueño y mal no recuerdo
siempre te lo decía y me refugiaba en tus brazos, de modo sentir que era
realidad.
Ya
no visito los mismos lugares, a donde íbamos juntos a comer, a estar un
momentos a solas, me gustar sentir la brisa del lago, ir a la playa de siempre,
sabes no lo hago, porque siento como si la vida te hubiese arrancado de mi para
siempre, y los recuerdos me lastiman, quiero me enseñas, que me ayudes con este
amor a la distancia, y que esta tregua que nos separa no sea más fuerte que
nosotros…
TE AMO…
Te amo… multiplícalo por diez
Te amo… multiplícalo por cien
Te amo… multiplícalo por mil
Te amo multiplícalo por ti;
El resultado mi amor es igual a
Henry, (así como me escribes cuando te sientes ignorada por mi)
Es igual, a tú y yo,
Es igual, que decir juntos por siempre
O más bien dicho hasta siempre…
Se
despide de ti tu fiel enamorado, aquel que te ama tanto…
Henry
Benedicto Zuñiga Caal
15
de Agosto de 2016
No hay comentarios:
Publicar un comentario