martes, 2 de diciembre de 2014

VERSOS PARA ELLA



I
Cae la noche,
quedo en silencio
escucho el canto del viento
y el silbido de mi pecho
mis ojos deseando verte
y mis brazos abrazarte
son muchas las estrellas
que iluminan mi cielo
y la única persona que ilumina
mi vida eres tu
cada rincón de mi ser
lo llenas de amor,
ternura, caricias,
estar cada dia contigo
es sentir que estoy vivo
II
Esa mirada
tan suya y tan mía
que cuando no dices nada
ella lo dice todo
esos ojos fijos
que me ven sin parpadear
esa tierna boca que pronuncia
te amo
como no amarla
si ha penetrado con su mirada
a mi corazón
como no amarla si se ha vuelto mi esencia

III
Resulta imposible no amarla
es como pedirle al sol
que jamás de su calor
o querer que crezca
una planta sin regarla
me resulta imposible no amarla
si,
mí mirada la busca
como no verla si es inevitable
resistir a su presencia
IV
Cuando callas
me pareces como ausente
en ese silencio
y en la distancia
que aleja nuestros cuerpos
el eco de su voz despierta
nerviosismo, amor,
arranca suspiros
y me sudan las manos.

V
Son muchas las estrellas
que acompañan a la luna
le iluminan  de colores
a su alrededor
son muchas las mujeres en la tierra
y tú la única que ilumina mi vida

VI
"si me dieran a elegir 
otra vez mas
te elegiría a ti sin pensarlo
amada mía
estoy extrañándote
y es que no te he perdido
no quiero perderte
si eso llegara a pasar seria mi muerte.


Autor: Henry Benedicto Zuñiga Caal
Peten-Guatemala
foto web

Duérmete



Duérmete, duérmete mi niño,
duérmete mi niño en tu tapexco
 
que preparé con amor,
duérmete, duérmete retoño mío,
que tu madre esta mañana me acompaña a limpiar la milpa
por la tarde te traeremos aromas de las flores
llena de dulzura y ternura de esta primavera
traeremos elotes para preparar tamalitos y elotascas
comeremos juntos bajo la oscuridad y la luz de la luna.

Henry Benedicto Zúñiga Caal.
Escritor inédito

foto web

Retoños de mi ser



Esas caritas de niños y niñas  manchadas de frijoles
Hijos, hijos míos sangre de mi sangre,
Llenos de vigor, amor, paz y ternura
No es que sean salvajes
Pues ellos juegan con las mariposas
Cantan con las aves y lloran con los árboles
Por las tardes escriben cuentos
Y por las mañana suelen arrancar las hojas 
Pues creen que cada día es una nueva oportunidad de vivir
Y para no recordar los sufrimientos 
Arrancan las hojas de sus escritos, 
Las esconden bajo la tierra esperando sean descubiertos en un futuro
Como oro lleno de valor cultural
Retoños de mi ser
Pedacitos de mí, que pasean bajo las hojas de la milpa
Mientras la nena me trae agua en su tecomate para saciar mi sed
Su  madre en la troja muele que muele esos granos de maíz
Mientras  el fuerte sol da vigor a nuestra siembra
Comeré elotes asados con los retoños de mi ser
Ellos juegan con la tierra 
Le entregan su cariño pues tienen la oportunidad de contarle sus penas
Ella en ese silencio inmenso les escucha 
No diciendo nada en palabras de hombre
Pero si respondiendo en actos naturales.

Henry Benedicto Zúñiga Caal.
Escritor inédito. 
foto web

Ocaso de mi vida,




Yo ya no puedo más,
La ventana de mi alma se está cerrando...
 
Mi corazón no está palpitando,
 
Estoy muriendo pausadamente,
 
A veces a la ligera, otras veces despacio,
Quisiera ser piedra, para no sentir dolor,
A veces quisiera ser dolor para no sentirlo,
No soy ni uno ni lo otro,
Simplemente soy humano.
 

  Henry Benedicto Zúñiga Caal.
     Poeta.
2-11-13

foto web

TE CONOZCO



Yo que conozco tu manera de reír,
En las horas solas cuando no dices nada,
He aprendido a conocer tu tristeza,
E inclusive hasta los dolores que te aquejan, 
Los colores, los sabores, prefieres, las llamadas a los mensajes,
Amas las poesías y canciones,
Se acelera su corazón al verme con una rosa en las manos,
Son enteros los días que pasas disfrutando de ello.

En algún lugar habrá un rosal dando rosas
Dichas rosas estoy tratando de buscar 
Para llevarle a la dueña de mis heridas,
La dueña de mi amor,
Salir a la calle, caminar y ver que todo gira
Mientras estoy fuera del mundo,
Estoy lejos pero tan lejos de tu vida,
Tus pensamientos, tu mirada,
Estoy cayendo al borde de un profundo abismo,
Me quiero morir sin tu amor.

Cada vez que pienso y recuerdo los momentos
Junto a ti mi eterna tristeza aumenta,
Cuando pienso en ti, cuando pienso en ti,
Me vuelvo un poeta,
Tú te vuelves una ladrona,
Te robas mis suspiros,
Las noches se vuelven frías 
Porque los problemas se han llevado todo lo que tenia
Te robas mi vida y mis mejores sueños,
Te llevaste mi vida,
Ven, y devuélveme la vida y la alegría,
Solo no puedo continuar,
Tú te llevaste mi felicidad,
Tú te robaste toda mi vida.

Henry Benedicto Zúñiga Caal.
(DERECHOS RESERVADOS) 
09-08-14
FOTO WEB


Miedo

 Sentí deseo de buscarte y a la vez miedo de que no sea cierto... Que tú estés en alguna parte esperándome. Miedo a que solo yo esté buscánd...